Hace
unos semestres, tenía el placer de ver Fresa
y chocolate para mi clase de Latin Lovers de Profesora Annette Levine. En esa
clase, hemos leído el cuento El Lobo, el
bosque y el hombre nuevo escrito por Senel Paz. Él también escribió el
guion de Fresa y chocolate que es
basado en su cuento. Para la mayoría de la clase, hemos discutido las
cuestiones sobre la homosexualidad en Latinoamérica y como los problemas con
machismo, el patriarca, y homofobia hacen daño y debilitan los individuos homosexuales
que viven en América Latina como Diego en la película. Lo que me disfrutó mucho
de la película es como David, una persona criado con una mentalidad machista y
anti-homosexual, con el tiempo desarrolla una amistad con Diego, y aprende que
Diego es una persona humana con deseos, miedos, y aspiraciones como todas las
otras personas en el mundo a pesar de su orientación sexual. Con esta amistad,
David también empieza a entender las dificultades que Diego tiene que manejar
cada día como un hombre homosexual viviendo en Cuba.
Mirando
esta película, especialmente después de los eventos trágicos que ocurrieron en
Orlando, FL el fin de semana pasado, me muestra que a pesar de los progresos
que hemos hecho sobre los derechos de LGBT, todavía tenemos que apoyar todas
las personas que están sufriendo porque personas ignorantes y odiosos no tienen
la capacidad de aceptar todos tipos de personas independientemente de sus orientaciones
sexuales, sus géneros, sus religiones, y sus razas.
Andrea, estoy de acuerdo. Parecía muy importante ver estas películas muy cerca de los eventos horribles que ocurrieron en Orlando. Me gusta mucho lo que dijiste sobre la parte mejor de Fresa y Chocolate, que es la amistad que se forma entre Diego y David. Nos muestra que la única cosa necesaria para superar la discriminación, el odio, y la homofobia es una conexión humana que puede existir entre cada persona, si solamente abrieran nuestros corazones a lo que no entiendan, y aceptemos que todos somos hermanos.
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